jueves, 26 de septiembre de 2013


LÓGICA
TALLER
 Este taller debe ser realizado completamente en el cuaderno de FpN
 
1. ¿A qué podemos llamar juicio?
 
2. ¿Según su conveniencia los juicios pueden ser?
 
3. ¿Según los juicios, qué es el sujeto y qué es el predicado y cómo se representan?
 
4. Elabore un cuadro donde se explique la clasificación de los juicios.
 
5. Escriba 5 ejemplos de juicios tipo A
 
6.Escriba 5 ejemplos de juicios tipo E
 
7.Escriba 5 ejemplos de juicios tipo I
 
8.Escriba 5 ejemplos de juicios tipo O
 
9. Realice las siguietes conversiones con la ayuda del cuadro de las relaciones de oposición
a. Convierta un juicio tipo A en su contradictorio
b. Convierta un juicio tipo A en su contrario
c. Convierta un juicio tipo E en su contradictorio
d.Convierta un juicio tipo E en su subalterno
e. Convierta un juicio tipo I en su contradictorio
f. Convierta un juicio tipo I en su subcontrario
g. Convierta un juicio tipo O en su subalterno
h. Convierta un juicio tipo O en su subcontrario
 
10. Escriba 5 ejemplos de razonamiento deductivo indicando: premisa mayor, premisa menor, término mayor, término medio, término menor y conclusión.

LÓGICA ARISTOTÉLICA GRADO 7°

EL DESCUBRIMEINTO DE  HARRY

1.2. Lógica: los juicios

La lógica aristotélica. Los juicios

1.La relación de dos conceptos da lugar a la formulación de un juicio. Si se da entre ambos una relación de conveniencia decimos que el juicio es afirmativo, y en caso contrario, negativo. El sujeto del juicio es el concepto del que se afirma o niega algo; el predicado es el concepto que se afirma o niega del sujeto. Aristóteles distingue en los juicios la materia y la forma. La materia o contenido del juicio son los conceptos que se relacionan; la forma es la relación que se establece entre ellos a través del verbo ser. Aristóteles representa el sujeto del juicio con un signo (S) y el predicado con otro (P) para intentar separar la materia de la forma: así, la forma del juicio "Juan es alto" se representaría como "S es P", y la forma del juicio "Juan no es alto" como "S no es P".

 

2.Los juicios se clasifican en varios grupos, atendiendo a la cantidad (según la extensión del sujeto: universales, particulares, singulares), la cualidad (según la cualidad de la cópula: afirmativos y negativos), la relación (según la relación entre el sujeto y el predicado: categóricos, hipotéticos y disyuntivos) y la modalidad (según el modo en que expresan la relación entre el sujeto y el predicado: apodícticos, asertóricos y problemáticos). De ahí se sigue una clasificación ordenada de todas las formas de juicio; en el caso de los juicios categóricos, por ejemplo, se daría la siguiente clasificación, combinando la cantidad (universal y particular) y la cualidad (afirmativo y negativo):

Clases de juicios y letras que los representan
Clase de juicio
Representación
Universal afirmativo
Se suele representar con la letra A
Universal negativo
Se suele representar con la letra E
Particular afirmativo
Se suele representar con la letra I
Particular negativo
Se suele representar con la letra O


3. La asignación de estas letras para representar las formas del juicio categórico es posterior a Aristóteles y procede de las palabras latinas "Afirmo" y "niego", y es la que se ha utilizado tradicionalmente entre nosotros para referirnos a la clasificación aristotélica de los juicios. También Aristóteles estudia las formas de oposición entre los juicios, (es decir, la diversidad entre los juicios que tienen el mismo sujeto y predicado), deduciendo una serie de reglas sobre la verdad de los mismos que se han de cumplir independientemente de los conceptos que elijamos para formar los juicios.

 

4. En función de tales reglas se pueden establecer relaciones de oposición entre los distintos tipos de juicios, según sean contrarios, contradictorios, subcontrarios o subalternos, determinando su valor de verdad en función del tipo de oposición con otro juicio conocido. Se pueden representar con el cuadro siguiente:

Descripción: Cuadro con las relaciones de los juicios, según sean contrarios, contradictorios, subcontrarios o subalternos

 

Al igual que ocurría con los conceptos, que son actos mentales que se expresan mediante términos lingüísticos, los juicios son actos mentales que se expresan mediante proposiciones, es decir, mediante un conjunto de palabras u oración gramatical. El mismo juicio se puede expresar con distintas proposiciones (por ejemplo, usando distintos idiomas), y a veces la misma proposición puede referirse a juicios distintos, ("ésta es mi casa" dicha por dos personas distintas).

1.3. Lógica: los razonamientos

La lógica aristotélica. Los razonamientos

  1. El razonamiento es un encadenamiento de juicios en el que partiendo de una proposición conocida se descubre otra u otras desconocidas. Aristóteles, en los Analíticos, se ocupa tanto del razonamiento deductivo como del inductivo, pero considera que el conocimiento científico se alcanza deduciendo lo particular de lo general, es decir, con el conocimiento de las causas. Aristóteles privilegiará, por tanto, el análisis del razonamiento deductivo, y en especial del razonamiento deductivo categórico o silogismo.

  1. Del mismo modo que distinguimos en el juicio una materia y una forma hemos de hacer lo propio con el razonamiento; la materia próxima del razonamiento son los juicios, y la materia remota los conceptos (que son la materia de los juicios). La forma consiste el nexo o conexión legítima entre los juicios antecedentes y los consecuentes y se expresa mediante conjunciones como "luego", "por lo tanto", "por consiguiente", a través de las cuales se realiza el proceso de inferencia, la consecuencia de unos juicios a otros. Aristóteles afirma que este proceso está sometido a reglas que permiten determinar su corrección o incorrección, de tal modo que, si los juicios de los que se parte son verdaderos, y la inferencia se realiza de acuerdo con las reglas definidas (si la inferencia es válida, pues) la conclusión será necesariamente verdadera. El proceso de inferencia no dependerá, pues, de la materia del razonamiento, sino de su forma.

  1. El razonamiento deductivo es una forma de razonamiento que va del todo a las partes es decir, intenta extraer de una verdad universal otra particular. Puede ser de tres clases: categórico, hipotético y disyuntivo, atendiendo al tipo de juicio (por la relación) que le sirva de punto de partida.


Clases de razonamiento y ejemplos correspondientes
Clase de razonamiento
Ejemplo correspondiente a dicha clase
Razonamiento categórico
Todos los humanos son mortales
Los madrileños son humanos
Luego los madrileños son mortales
Razonamiento hipotético
Si apruebas irás de vacaciones
Es así que has aprobado
Luego irás de vacaciones
Razonamiento disyuntivo
Por este camino se va al norte o al sur
Es así que se va al norte
Luego no se va al sur

4. El silogismo es un razonamiento deductivo categórico mediante el cual, partiendo de dos juicios dados inferimos uno nuevo. Consta, pues, de tres proposiciones (que expresan tres juicios) y de tres términos (que expresan tres conceptos), que constituyen la materia próxima y remota del razonamiento, respectivamente. La premisa que sirve de punto de partida se llama "premisa mayor" y es la más general; la premisa que sirve de intermediario se llama "premisa menor", y es menos general que la anterior; la proposición que se deduce de la "mayor" por mediación de la "menor" es la conclusión del razonamiento.

 
5. En cuanto a los términos del razonamiento, se llama "término mayor" al predicado de la conclusión, que debe aparecer en la premisa mayor, y se le representa con la letra P. Se llama "término menor" al sujeto de la conclusión, que aparece también en la premisa menor, y se le representa con la letra S. El "término medio" es el que aparece en las dos premisas (mayor y menor) y no en la conclusión, y se le representa con la letra M. Por lo tanto, tomando el ejemplo anterior de razonamiento categórico, podríamos representarlo como sigue:

 

Clase de razonamiento, ejemplo correspondiente y representación formal
Clase de razonamiento
Ejemplo correspondiente
Representación formal
Razonamiento categórico
Todos los humanos son mortales
Los madrileños son humanos
Luego los madrileños sonmortales
M es P
S es M
----------
S es P
Donde el término mayor es "mortales" (P), el término menor es "madrileños" (S), y el término medio es "humanos" (M).

6. Aristóteles distingue cuatro formas válidas de silogismo, conocidas tradicionalmente como figuras del silogismo, y que resultan del distinto lugar que ocupa el término medio, y por lo tanto de la función que le corresponde, en las premisas. La conclusión de todas las figuras es siempre S es P. Las formas válidas o figuras del silogismo son las siguientes (aunque la última fue considerada por Aristóteles como una mera variante de la primera):


Las formas válidas del silogismo, o figuras del silogismo
Primera figura
Segunda figura
Tercera figura
cuarta figura
M es P
S es M
----------
S es P
P es M
S es M
----------
S es P
M es P
M es S
----------
S es P
P es M
M es S
----------
S es P
El término medio es Sujeto en la premisa mayor y Predicado en la menor
El término medio es Predicado en ambas premisas
El término medio es Sujeto en ambas premisas
El término medio es Predicado en la premisa mayor y Sujeto en la menor

 
7. Estas cuatro figuras pueden, a su vez, teniendo en cuenta la cualidad y la cantidad de las proposiciones que las componen, dar lugar a un total de 64 modos diferentes de silogismo, de los que sólo 19 son modos válidos de razonamiento. Su validez la establece Aristóteles a partir de la determinación de las leyes o reglas de legitimidad del silogismo. Entre ellas, que el silogismo ha de constar de tres términos, que no pueden ser tomados con mayor extensión en la conclusión que en las premisas, que el término medio ha de tomarse universalmente al menos en una premisa (o en ambas), que de dos premisas negativas no se puede seguir ninguna conclusión, etc.
 

8. El fundamento del silogismo suscitó también la curiosidad investigadora de Aristóteles, ya que al basarse la inferencia en la validez de las premisas anteriores se planteaba el problema del recurso al infinito para justificar el razonamiento. Si cada premisa tiene que estar justificada por otra, en efecto, ¿cómo detener la necesidad de justificar el principio del principio? Esto nos llevaría a un proceso infinito de justificación, por lo que Aristóteles afirmó que existían ciertos principios que eran conocidos intuitivamente y que no necesitaban demostración. El más fundamental de todos era el principio de contradicción (no es posible que algo sea y no sea, al mismo tiempo, y bajo la misma consideración); de él se sigue el de identidad (algo es igual a sí mismo) y el de igualdad (dos cosas iguales a una tercera son iguales entre sí), y otros que se siguen de los anteriores.
 
 
Ejemplos de razonamiento deductivo
 
Premisa mayor: Los seres humanos  tienen dos manos y dos pies
Premisa menor: John es ser humano
Conclusión: John Tiene dos manos y dos pies
 
Premisa mayor: Todos los miércoles John sale 10 minutos antes de su trabajo
Premisa menor: Hoy es miércoles
Conclusión: Hoy John saldrá 10 minutos antes de su trabajo
 
Premisa mayor: Toda planta nace, se reproduce y muere
Premisa menor: Toda rosa es planta
Conclusión: Toda rosa nace, se reproduce y muere
 
Premisa mayor: Todos los hijos de John y Jane tienen ojos color marrón
Premisa menor: John y Jane esperan un hijo
Conclusión: El hijo que esperan John y Jane tiene los ojos color marrón
 
Premisa mayor: Las galletas tardan 45 minutos en hornearse
Premisa menor: Son las 3:00 pm y Jane mete las galletas al horno
Conclusión: Las galletas estarán listas a las 3:45
 
 
 
 
 
 
 
 

 

martes, 17 de septiembre de 2013


EL SILOGISMO
IV PERIODO
El silogismo es una forma de razonamiento deductivo que consta de dos proposiciones como premisas y otra como conclusión, siendo la última una inferencia necesariamente deductiva de las otras dos. Fue formulado por primera vez por Aristóteles, en su obra lógica recopilada como El Organon, de sus libros conocidos como Primeros Analíticos
Aristóteles consideraba la lógica como lógica de relación de términos. Los términos se unen o separan en los juicios. Los juicios aristotélicos son considerados desde el punto de vista de unión o separación de dos términos, un sujeto y un predicado. Hoy se hablaría de proposiciones.
La diferencia entre juicio y proposición es importante. La proposición afirma un hecho como un todo, que es o no es, como contenido lógico del conocimiento. El juicio, en cambio, atribuye un predicado a un sujeto lógico del conocimiento. Esto tiene su importancia en el concepto mismo del contenido de uno y otra, especialmente en los casos de negación, como se ve en la problemática de la lógica silogística.
Mantenemos aquí la denominación de juicio por ser lo más acorde con lo tradicional, teniendo en cuenta que este tipo de lógica, como tal, está en claro desuso, sustituida por la lógica simbólica en la que esta lógica es interpretada como lógica de clases. Ver cálculo lógico.
La relación entre los términos de un juicio, al ser comparado con un tercero que hace de "término medio", hace posible la aparición de las posibles conclusiones. Así pues, el silogismo consta de dos juicios, premisa mayor y premisa menor, en los que se comparan tres términos, de cuya comparación se obtiene un nuevo juicio como conclusión.
La lógica trata de establecer las leyes que garantizan que, de la verdad de los juicios comparados (premisas), se pueda obtener con garantía de verdad un nuevo juicio verdadero (conclusión).

Los juicios aristotélicos: Definición y elementos del silogismo

El juicio aristotélico considera la relación entre dos términos: un Sujeto, S, y un predicado, P.
Los términos pueden ser tomados en su extensión universal: abarca a todos los miembros a los cuales representa el concepto. O en su extensión particular: cuando sólo se refiere a algunos.
Los juicios por la extensión en la que es tomado el término sujeto, como criterio de cantidad, pueden ser:
UNIVERSALES: Todo S es P
PARTICULARES: Algunos S son P
Nota: Los nombres propios tienen extensión universal; pues el uno, como único, equivale a todos.
La relación entre los términos puede ser asimismo:
AFIRMATIVOS: De unión: S es P.
NEGATIVOS: De separación: S es no-P.
Nota: El predicado de una afirmación siempre tiene extensión particular, y el predicado de una negación está tomado en su extensión universal. Cuando un concepto, sujeto o predicado, está tomado en toda su extensión se dice que está distribuido; cuando no, se dice que está no distribuido.
Según el criterio de cantidad y cualidad, resulta la siguiente clasificación de los juicios:
 
 
CLASE
DENOMINACIÓN
ESQUEMA
EXPRESIÓN-EJEMPLO
Extensión de los términos
A
Universal Afirmativo
Todo S es P
Todos los hombres son mortales
S: Universal P: Particular
E
Universal Negativo
Ningún S es P[]
Ningún hombre es mortal
S: Universal P: Universal
I
Particular afirmativo
Algún S es P
Algún hombre es mortal
S: Particular P: Particular
O
Particular Negativo
Algún S es no-P[]
Algún hombre es no-mortal[7]
S: Particular P: Universal
 
ANTECEDENTE = Dos premisas:
Premisa mayor, en la que se encuentra el término mayor, que es el predicado de la conclusión, que se representa como P.
Premisa menor, en la que se encuentra el término menor, que es el sujeto de la conclusión, que se representa como S.
Entre ambas se realiza la comparación del término sujeto y el término predicado con respecto al término Medio, que se representa como M.
CONSECUENTE = Una conclusión:
En la que se establece la relación entre el término Sujeto S, y el término Predicado P.
TÉRMINOS:
Término mayor: Es el predicado de la conclusión. La premisa en la que se encuentra se llama Premisa mayor. Se representa como P.
Término menor: Es el sujeto de la conclusión. La premisa en la que se encuentra se llama Premisa menor. Se representa como S.
Término medio: Que sirve de comparación (tertium comparationis) y no puede estar en la conclusión. Se representa como M.
 Reglas del silogismo

Reglas para los términos

+ El silogismo no puede tener más de tres términos.
Esta ley se limita a cumplir la estructura misma del silogismo: La comparación de dos términos con un tercero. Aunque la regla es clara, su aplicación no siempre lo es. Es lo que algunos llaman silogismo de cuatro patas. Consideremos el siguiente silogismo:
Todos los hombres nacen libres
Ninguna mujer es un hombre
Por tanto, ninguna mujer nació libre
En la primera premisa estamos hablando de hombres como especie del género homo , y en la segunda estamos hablando de hombre como varón. Este silogismo es de todo punto inválido, aunque siga una forma aparentemente válida.
+ Los términos no deben tener mayor extensión en la conclusión que en las premisas.
Por la misma estructura del silogismo; únicamente podremos obtener conclusiones acerca que lo que hemos comparado en las premisas.
+ El término medio no puede entrar en la conclusión.
Por la misma estructura del silogismo la función del término medio es servir de intermediario, como término de la comparación.
+ El término medio ha de tomarse en su extensión universal por lo menos en una de las premisas.     
Para que la comparación sea tal, es necesario que el término medio sea comparado en su totalidad. De otra forma, podría ser comparado un término con una parte y el otro con la otra, constituyéndose en realidad entonces un silogismo de cuatro términos.
Todos los andaluces son españoles.
Algunos españoles son gallegos.
Por tanto, algunos gallegos son andaluces
Lo que evidentemente no es un modo válido, puesto que "españoles" en la premisa mayor al ser predicado de una afirmativa está tomado en su extensión particular.

Reglas de las premisas

- De dos premisas negativas no puede obtenerse conclusión alguna.
Dos premisas negativas no se adaptan a la estructura del silogismo, ya que si negamos S de M, y P de M, no sabemos qué relación puede haber entre S y P. Para establecer la relación, por lo menos uno de los términos tiene que identificarse con M. Por tanto una de las dos premisas tiene que ser afirmativa.
- De dos premisas afirmativas no puede sacarse una conclusión negativa.
En efecto, si S se identifica con M, y P también se identifica con M, no tiene sentido establecer una relación negativa con entre S y P. La conclusión será afirmativa.
- La conclusión siempre sigue la peor parte. Entendiendo por peor parte, la negativa respecto a la afirmativa y lo particular respecto a lo universal.
Veamos los dos casos separadamente:
a) Conclusión negativa de una premisa afirmativa y la otra negativa.
Si se afirma una relación entre dos términos (X, M), pero se niega la de uno de ellos con otro (Y, M), siendo M el término medio, no puede haber más conclusión que negar la relación que pueda haber entre el primero (X) y el último (Y) siendo uno sujeto y el otro predicado de la conclusión.
b) Conclusión particular de una premisa universal y otra particular (teniendo en cuenta que dos premisas particulares no puede ser, como veremos en la regla siguiente).
Pueden darse dos casos: Que una sea afirmativa y la otra negativa, o que las dos sean afirmativas.
1º) Dos afirmativas. (Tenemos que recordar que el Predicado de una afirmativa está tomado en su extensión particular, y el Predicado de una negativa en su extensión universal).
Al ser las dos afirmativas sus predicados son particulares. El término de la Universal tiene necesariamente que ser el Término Medio, la conclusión tiene que tener un sujeto particular.
2º) Una afirmativa y otra negativa: Tiene que haber dos términos universales. Uno de ellos tiene que ser el término medio, el otro tiene que ser el predicado de la conclusión, pues la conclusión tendrá que ser negativa, (caso a) de esta misma regla). Por tanto el término que queda será el sujeto de la conclusión con extensión particular.
- De dos premisas particulares no se saca conclusión.
También tiene dos casos posibles: que una sea afirmativa y la otra negativa o que las dos sean afirmativas.
a) Afirmativa y negativa: Algún A es B - Algún A no es C.
Sólo hay un término universal que es el predicado de la negativa, que por tanto tiene que ser el Término Medio. La conclusión tendrá que ser negativa (caso a) de la regla anterior), y por tanto el predicado tendrá que ser universal, y no puede ser el Término Medio por tanto no puede haber conclusión.
b) Dos afirmativas: Algún A es B - Algún A es C.
Los tres términos son particulares, y por tanto no puede haber Término medio con extensión universal, y por tanto no hay conclusión posible.